A pesar de las cicatrices

Nunca ha sido fácil aprender, aprender cosas... Cosas que realmente valgan esos instantes que nos roban una sonrisa, la alegría que nos llena el corazón y hace que nuestra alma viva.Pensar, pensar es lo que uno deja de hacer cuando quiere que el corazón se le llene de pasión, que la fe aumente a gran manera, creyendo en el amor, tragando ilusiones que alimentan la existencia en este mundo donde lo único palpable y real es el odio y la sangre derramada...Y es aquí donde recuerdo tu voz en mi, depositada y elegida por mi para hacerme Feliz, fue la gana, el humor de aquellos días de armonía, con los seres queridos , ese olor a dulce hogar, que dio confort a mi alma tan agitada, te vi como mi parte protectora, tu risa, tus ojos llenos de ternura, toque tu mano y sentí tu corazón... Como siempre el tiempo pasa y no pasa sin dejar rastro, y a mi me dejaba sin ti, sin tus ojos, sin el latir de tu corazón y el mío amándonos...Me quedaba con las ilusiones en los puños de mi corazón, las promesas y las alegrías de que en menos de seis meses regresarías y nos amaríamos mas y mas... Los planes de envejecer juntos, de compartir la vida a tu lado con el mismo fin aumentaban, el sacrificar mi vida por la nuestra, las las esperanzar renacían al verte partir, el contar los días para esperar y sonreír...El día en que todas estas cosas se cumplirían, no era un cuento de hadas, no lo fue, lo sentí, lo viví, me entregue sin miedos, pensando qué amando al mismo Dios, teniendo y compartiendo los mismos seres amados, ideales y cosas en común era mas que suficiente, para tener fe y pensar que esos días llegarían junto con toda esa magia que explotaría enfrente de nosotros y existiría en nuestras vidas un goce pleno....Disfrutaba cada instante contigo y sin ti sabiendote lejos pero conmigo...Detalles, promesas, tus ojos y los míos brillando... Hasta que llego ese día, que tal vez has pensado pero no quieres que llegue, que se cumpla... Y llego, llego el día en que pensé en maldecir, el día en que el desconcierto y la decepción llego q mi sin saber que pasaba, el día que dijiste "no" ya no puedo... Mi mente no recuerda las palabras precisas... Y creo que no es necesario recordarlas, al sentir tan cruel dolor en mi pecho, en mi alma y el frío y la ansiedad en mi ser... Llanto, angustia, mis explicaciones, innecesarias, inútiles , e irrazonables, tus miedos, los míos, mi inseguridad, el incierto, el maldito incierto. A pesar del daño, de los sueños destrozados en pedazos, del amor acumulado por ti y para ti, aun te pienso, y mi mente no entiende como tan magnifico amor se acaba en tan poco tiempo, razones atroces me lo explican... Y hasta el día de hoy no los concibo solo me queda... seguir caminando... con tu recuerdo a cuestas, sin pretenderlo, buscando la cura de estas heridas para cuando mi corazón este listo, volver a amar como un día lo hice contigo , esperando y teniendo la fe adecuada de encontrar a un corazón que vaya mas allá de su amor propio, de sus miedos, que no tema amar, ni ser amado... a pesar de las cicatrices...